La locura (o la alternativa política del idiota)

Como dijimos en el prólogo de su anterior libro Lacan, el bárbaro, Eduardo Pérez Peña proviene, como el bárbaro de Miguel de Unamuno, de otros ámbitos, lo que acentúa la particularidad de su enfoque. Para el lector que, cansado de los esquemas repetidos, tiene sed de originalidad, este texto será como agua fresca. Una nueva manera de ver "lo nuevo" de Jacques Lacan, envejecido prematuramente por algunos de sus epígonos.Este libro provocará seguramente, como ya lo hizo Lacan, el bárbaro, apasionadas discusiones y fructíferas reflexiones sobre la teoría psicoanalítica. Jorge Ariel Kury // La soltura con la que Pérez Peña se va moviendo en el psicoanálisis le permite mencionar temas que para algunos serían tabú en un pretendido respeto a un Lacan escolar. Me refiero a darle al cuerpo una adscripción como real o referirse sin horror a las zonas erógenas de Abraham y considerar desde estas perspectivas el concepto de Anlehnung; o abrir el tema de la llamada por Freud "represión orgánica". Trae estas consideraciones muchas veces calificadas de anatemas por cierto exceso estructuralista una brisa freudiana al texto que lo hace muy singular. Leonardo Peskin